“Yo sé que los Reyes Magos no existen, que eres tú quien deja los juguetes”, es una frase con la que muchos padres han sido sorprendidos por sus hijos cuando no tienen en planes terminar con la historia de los personajes que fomentan la ilusión y la fantasía en sus pequeños.
Enterarse de una forma repentina, y por un tercero, puede destruir su ilusión, además enojarse con sus progenitores por la mentira, lo cual hace preguntarse a papá y mamá ¿Cómo manejo la situación?
La Psicóloga Clínica Infanto-Juvenil, Stephany Fernández, explica que en primera instancia es bueno saber que la imaginación y la fantasía son una parte natural y también decisiva en el desarrollo cognitivo de un niño/a, ellos mismos inventan historias para expresar el mundo como lo perciben a su alrededor. Así que hablarle de los Reyes Magos es un efecto muy parecido al de contarles cuentos.
“Aunque pueda parecer un poco insignificante, el enterarse que los Reyes no son reales es un momento crucial para muchos niños, puesto que creer en la existencia de estos facilita un espacio para un mundo donde todo es posible con la magia. Es por esto que al momento que lo descubren pueden empezar a reconsiderar todas sus ideas y creencias acerca del mundo que los rodea, empezarán a distinguir de forma totalmente consciente, entre fantasía y realidad”, explica la especialista del Hospital Metropolitano de Santiago.
La doctora Fernández recomendó a los padres que al momento que sus pequeños descubran que los famosos personajes que regalan juguetes no existen, lo ideal es cuidar mucho el lenguaje en el que se le seguirá comunicando las cosas.
“Utilizar palabras sencillas, no ser muy racional y tratar de ser respetuoso, cercano y amoroso con las emociones que esté presentando en el momento. Algo que se pudiera hacer sería explicarle de dónde viene la tradición de regalos (como la historia de los Reyes de Oriente); hacerle entender que lo importante de esta época no es el tener regalos de una persona mágica, sino que es un tiempo de pasarla juntos en familia”.
Mantener la ilusión
Al cuestionar a la profesional sobre si es posible seguir manteniendo la ilusión en ellos, tras el descubrimiento, su respuesta es afirmativa.
“En el momento que el niño sepa la realidad, se pueden plantear juntos cómo serán las próximas celebraciones a partir de ese momento. Si hay niños más pequeños en casa se le explica que ahora pueden formar parte de esa fantasía para su hermanito/a, ayudando en la compra de los regalos para los demás, en la preparación de todo; dejarles saber que es una época de amor, de felicidad, de dar sin esperar nada a cambio y de lo mucho que se ha disfrutado anteriormente haciendo lo mismo por él o ella”.
Respuestas a las dudas
En caso de que aún no se hayan enterado, pero tengan duda de la existencia de los famosos Melchor, Gaspar y Baltazar, Fernández considera que lo recomendable es preguntarle directamente qué cree, así primero se sabrá hasta dónde llegan sus sospechas.
“De igual manera, si algún compañero de clases o un amiguito le ha dicho que estos no existen, no es recomendable mentirle. Se le puede aclarar que es una tradición que se ha hecho desde hace muchos años para enseñarle a los niños que hay personas que les da alegría hacer feliz a los demás sin pedir nada a cambio”.
“Otro consejo que puedo brindar es que si se puede manejar la información de cuándo y cómo decirlo lo más recomendable sería evitar hacerlo en la misma fecha, puesto que ésta es la época donde más ilusionado se está. Se puede esperar unos meses luego de la festividad para explicarles que los Reyes Magos no existen, de esa forma no se rompería la ilusión en su momento más crucial”.
