“Cuando ocurra un accidente, soluciona todo bajo un solo techo. Desde los trámites de realizar el acto policial hasta la gestión con tu aseguradora”. Con la frase, promociona sus servicios la Casa del Conductor CMA, un negocio privado que se promueve desde el Estado.
Desde la Ley 63-17, de Movilidad, Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial de la República Dominicana, que establece pautas sobre el funcionamiento de este tipo de negocios, hasta acuerdos particulares con entes estatales permiten la operatividad de este servicio en el país.
Definido como un centro de retención, regulado por la Dirección de Prisiones de la Procuraduría General de la República, sus facilidades no están dispuestas para todo el ciudadano que se vea envuelto en un accidente de tránsito, sino para aquellos que, en tales circunstancias, paguen una póliza de manera directa o a través de una aseguradora de vehículos.
El costo para los que se afilian en la empresa, es de 2,000 pesos anual. A cambio se ofrecen los trámites en policía, fiscalía, médico legista, asistencia vial, alojamiento, comedor, entre otras facilidades.